lunes, septiembre 25, 2006

AZUL OSCURO-NARANJA INTENSO MEDIO OCRE


"...Pasó el tiempo y Nabarao se hizo grande y poderoso y a su vez tuvo muchas mujeres e hijos y los los animales le respetaban...Todas sus hijas eran muy hermosas y delicadas y trabajaban con gran dulzura a los Guaraunos"

(Francesc Ll. Cardona, 2002. Mitología, Historias y Leyendas de Venezuela. Edicomunicación, S.A: Barcelona, España)

Imagen: Thor en la Batalla contra los Gigantes, Marten E.Winge, 1872. http://es.wikipedia.org/wiki/Thor_%28mitolog%C3%ADa%29


"En nombre de..."
Azul Oscuro-Naranja Intenso Medio Ocre

Erguida y taciturna, lenta, extrovertida, equilibrada, aguda, locuaz, desequilibrada, rápida, megacerebral, viva, tonta, mente estrecha, inteligente y estúpida, audaz, ciega en un coeficiente 20/20, parcial e imparcial, parecida al mono de “ver, oír y callar” que se quita furtivamente la mano de los ojos, de los oídos y de la boca; cruel y bondadosa, convincente, a veces topo, a veces gusano, a veces águila, a veces anguila, a veces felina, a veces can, a veces gorila, a veces gallina, engreída, a…….z; y también Thor para poder mantener siempre en su mano un instrumento de medición tan pesado; se mueve ella, siempre está en movimiento; sus mil caras, o su cara única, la hacen única, o único, o múltiple en una, o una en múltiple: el monstruo de mil cabezas.

Diosa y dios, omnipresente y omnipotente, omnisciente y omni…omni; demonia y demonio, omnipotente, omni….omni: siempre, siempre omni vs omni. Jekill-Hyde, Bugs-Sam, blanco-negro: sus mestices, o, mejor, matices, de lejos y de cerca a veces son del tono medio ocre, a veces del tono azul-solar intenso. Mirada de súplica, a veces dura; siempre una espada como dedo índice.

Displástica, pícnica, flemática, afectada, masculinizada, afeminada, tiene en su virtud única la potente, irresistible, incuestionable, razón de ser, identidad y teleología absoluta, su Don principal: en-nombre-de: esencia, estirpe, incuestionabilidad, racionalidad, emocionalidad: Don creador: libertades absolutas y relativas, felicidad e infelicidad, dominación y hegemonía, opresión y sumisión: derecho y al-revés. Nunca en nombre de ella misma porque ella siempre es un otro.

Preguntemos a Homero: Zeus, Jano multifronte. Su tono medio hace dudar de su ceguera: Hera, Melissa, Temis, Diké, Irene, Leto, Apolo, Artemisa, Ares, Hebe, Hefeso, Ilitía, Gaminedes, Europa…desvanecimiento de su causa original: ¡he allí la tragedia!

bryce.alvy@gmail.com
Alvy Bryce Calles


miércoles, septiembre 20, 2006

PREÁMBULO A LOS EPISTEMÓLOGOS

Artículo previo: La Leyenda del Purgatorio, o... o...

Por la noche, intentando escapar de aquel lugar, el bicho se desplazaba
sigilosamente, pegado a las ardientes paredes que separaban el purgatorio del cielo, su contraseña, según le había indicado Pedro, hablándole en lengua a través de su cerebro de tal modo que nadie más oyera, sería el tocar con la
espalda un lugar de frío placentero: … ¡eso lo intentó siempre!

- Los que dicen mentiras, van al infierno; los que dicen la verdad, van al cielo: ¿a dónde van los que hablan creyendo que lo que dicen es verdad, siendo mentira?
- El Purgatorio pareciera el lugar más indicado, pero éste es también un lugar de castigo, ¿acaso no es ingenuo el que dice mentira creyendo que es verdad? ¿Entonces si enviamos a los epistemólogos al Purgatorio, no le estaríamos haciendo un grave daño a la ciencia?
- Pero, si es verdad lo que dicen, y nosotros creemos que es mentira, ¿los enviamos al infierno?...entonces los pecadores seremos nosotros. Pero si lo que dicen es mentira, y ellos lo saben, pero nosotros creemos que es verdad, ¿hacia dónde los enviamos?
- No, no, no: ¡UD está hablando más bien de ciertos abogados, ciertos militares, ciertos profesores, ciertos políticos, ciertos psiquiatras, ciertos...ciertos, no de los epistemólogos!
- Ahhh, perdone mi confusión…
- Pero, entonces: ¿cómo puedo yo verificar mi hipótesis y esquivar los errores tipo I y tipo II?
- No, no, señor: se vuelve UD a equivocar; no estamos hablando de los positivistas…
- Ahh, ahora sí estoy confundido: ¿qué pasa entonces con los que dicen la verdad siendo verdad?
- Ahora el que dice "ahhhh", soy yo. Ahora UD me ha confundido a mí: ¿acaso Dios es científico, o filósofo, o lógico, o estadístico, o le gusta jugar ajedrez, o algo así?
- Nada de eso, señor. Mire, para salirnos de este lío, y como ya existen tantos epistemólogos, o abogados, o políticos, o militares, ¿Por qué no le pedimos el favor a Dios para que nos envíe más bien Ontólogos o….Serólogos? Después de todo, por estas tierras hay muchos: dicen que los vieron pasar por Guanarito*...shhhh, me lo dijo Jano.


Alvy Bryce Calles
bryce.alvy@gmail.com

_______________________
* Hago alusión a una leyenda del llano venezolano denominada “El Silbón”, una forma de expresar el temor al diablo, en este caso encarnado en un espíritu errante. El Silbón, según la leyenda, se aparece en muchos rincones de esta extensa zona. En las siguientes direcciones puede ampliar la información:

http://www.musicallanera.net/leyendas_del_llano/el_silbon.htm
http://www.estasmuerto.com/leyendas/el_silbon.html
http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/specials/newsid_3878000/3878533.stm

martes, septiembre 19, 2006

EL DOCTOR CUALITATIVO

-¿Y ESE DOCTOR…SERÁ CUALITATIVO?
Me quedé mirando a mi interlocutor y amigo cuando me hizo la pregunta. En verdad, de momento no supe que responder, pero me recuperé y miré al conferencista objeto de la cuestión. Mi respuesta fue rápida y firme:

-“¡Sin duda alguna! Lo conozco, es un profesional muy estudioso, amistoso, humilde, entre otras cualidades, en fin...todos somos cualitativos.”

Por supuesto, con la respuesta no quise ofender a mi interlocutor, que con extrañeza me miró ante tal afirmación; se pasó la mano por la cabeza en actitud de sorpresa, dio la espalda, y se retiró, no sin antes lanzarme otra mirada, esta vez, según creo, de contrariedad. ¿Qué sería lo que me quería preguntar mi amigo?... Dado el contexto, finalmente pretendí entender su inquisición: ¿¡me querría preguntar si militaba el conferencista en las filas de investigadores que utilizan una estrategia que ellos denominan CUALITATIVA, o, si se inscribía en algo llamado PARADIGMA "metodológico cualitativo"? Le busqué con la mirada para replantearle la respuesta, pero ya no estaba.

Durante los días siguientes, intenté responderme a mí mismo, no si el conferencista era cualitativo, sino, más bien, si la denominada de diferentes modos, entre ellos, el de confrontación paradigmática, tenía objetividad. Esto complicó las cosas porque precisamente la objetividad parece ser uno de esos términos cuestionados hoy, a pesar de formar parte de los problemas esenciales de la teoría del conocimiento; de hecho, se le ha asociado más bien al denominado PARADIGMA POSITIVISTA, al decir, “científico”. “Subjetivo” pareciera ser en estos tiempos el término más adecuado para referirse a los asuntos académicos y, particularmente, los relacionados con los procesos de producción de conocimientos, lo cual parece una especie de moda confrontadora entre diferentes formas de entender los “nuevos” problemas del saber: sí, de moda: aunque no del todo.

Con este artículo inicio la exposición de algunas de mis percepciones e investigaciones acerca del movimiento actual de la complicada producción del conocimiento. Este, sin duda, se presenta como un tinglado cuya energía se hace de difícil desentrañamiento, con sus rasgos humanos, muy humanos: fugaz, rígido, flexibe, ambiguo, virulento, caótico, claro, ordenado, desordenado, político, ideológico, intocable, tocable, histórico, ahistórico, sincrónico, diacrónico, paradigmático, positivista, marxista, cualitativo, cuantitativo, antiparadigmático, oscuro, objetivo, subjetivo, puro, hereje: como se le mire, y mírele quien le mire, hay que abordarlo con detenimiento y prudencia. Hoy, cultores y detractores se presentan como un conjunto que pareciera estar "descubriendo" el nacimiento de la ciencia o mirando "en profundidad" al interior de las personas: ¡como si el sujeto estuviera desprendido del mundo! Algunos piensan que han dado un nuevo salto histórico, ¡así lo anuncian!, "erradicando" la "vieja práctica científica y positivista"; otros piensan que por más que quieran los detractores actuales, y pasados, de las denominadas ciencias exactas, arrancar de raíz con la escardilla posmoderna los fundantes de éstas, es, por ahora, una tarea, si no ingenua, muy difícil (aunque no imposible), claro, dificultad que no manifiestan los ahora comunes y masivos vendedores de discursos “epistemológicos posmodernos” (incluso,"ontoepistemológicos"), que paradójicamente incluye a unos cuantos que sólo creen en la estadística y en la contaduría.
Más importante que autodenominarse "epistemólogo" para entrar en querella por la querella misma, es hacer un esfuerzo por comprender el papel de la ciencia, el papel del conocimiento, en un mundo dividido entre ricos muy ricos, opulentos, y pobres muy pobres, hambrientos. Todo intento de profundizar en la búsqueda de la "esencia" misma del conocimiento, no debe dejar de otear la contradictoria realidad social con miras a su transformación. En este sentido, toda epistemología es política, ¡y a esto no hay que tenerle miedo!

Recuerdo ahora a Mario Bunge quien en una oportunidad dijo algo así como que para ser epistemólogo dentro de un campo del conocimiento, por ejemplo la física, primero había que ser físico, conocer la física, aplicar la física; aún cuando tengo, con respeto y humildad, ciertas discrepancias con el insigne científico: ¡estoy de acuerdo con lo que expresa!, pero le agrego la imperiosa necesidad de una formación tanto filosófica como cultural y científica tal que permita ampliar nuestra capacidad para totalizar. De hecho, la epistemología parece debatirse en un vaivén entre filosofía y ciencia: ¿separaciones? y ¿ambigüedadades? que obviamente tienen que afectar el medio académico.
Despejar las determinantes de la producción del conocimiento va mas allá de discursos cuestionadores, pues desde el discurso TODO VALE; el problema es comprender como el conocimiento y la transformación de la realidad son momentos de una misma actividad y una misma teleología: el trabajo productivo al servicio del mejoramiento de la calidad de vida de todas las personas: ¡las naturales, experimentales y exactas, son también ciencias sociales! La cuestión es, innegablemente, según creo, además de epistemológica, también ética, y algo más.

La investigación en educación, en mi opinión, está pasando por un estado de vulgarización (uso y abuso) llevado adelante por algunos actores del entorno universitario que afecta directamente a los principios reconocidos como fundantes de la producción cognoscitiva: particularmente a la epistemología más bien se le termina desconociendo por un efecto de anulación por exceso: ahora todo muestra apariencia de epistemología, lo que, si leemos entrelíneas, tiende más bien, hacia el nihilismo, a la nada, a la evaporación de todo significado. Tal desconocimiento es, según percibo, un ataque a veces desmedido, a veces con convicción y argumentos lógicamente claros -¿cuál lógica?-, contra los fundamentos del "método científico" atribuidos masivamente al positivismo, sin diferenciación, sin tomar en consideración el real-complejo significado de este último, y descalificando “de un plumazo metafísico”, el ser histórico de ambos (positivismo y método científico). Esto explica, afirmo, una especie de "abordaje filosófico" (a veces no tanto, a veces metafísico), que se expresa como desfile de diversos personajes (investigadores, intelectuales, filósofos, cientistas sociales: aunque no todos) que exhiben ropajes diversos, a veces con los mismos colores, y que abarca un stock de diseños con diferentes denominaciones e interpretaciones muy subjetivas y particulares por cierto, de archicomplejos sistemas (metidos en "un mismo saco" como "epistemología": la ontología tampoco se salva) como la filosofía de la ciencia, la teoría del conocimiento, gnoseología, la ciencia de la ciencia, metaciencia, a través de los cuales se intenta justificar, también de modo muy particular, prácticas como el construccionismo, el constructivismo, el naturalismo, el interaccionismo simbólico, la investigación acción, la hermenéutica, historias de vida, el método comparativo-continuo, el método etnográfico, entre otros (casi ad infinitum), embolsados en un paquete, a veces de contenido indiferenciado, llamado METODOS CUALITATIVOS, embolsamiento que en ocasiones va en detrimento de aspectos también fundamentales como la misma ética, la axiomática, la axiología, la lógica, la sociología del saber, la teleología, la política, la ontología, y, sobremanera, la práctica.

Más grave aún que el olvido de las estructuras íntimas de la producción del conocimiento es, en algunos casos, el alegre escardillazo "posmoderno" (que llega a los extremos de la negación absoluta) faltandole el respeto no sólo a los principios de la seria postmodernidad, sino también a los procesos que conducen a descubrimientos y conocimientos sólidos de la realidad a partir del método de las conocidas como ciencias naturales y exactas de, por ejemplo, la fisión nuclear o de la reproducción de condiciones experimentales en laboratorio para la creación de vacunas, o, más cerca de mi profesión, las relaciones estadísticas entre la formación del docente y su impacto en la formación de los estudiantes: ahora todo es “cualitativo” (como "paradigma"). Alguien me dijo, ¡aunque Ud. no lo crea!, que estaba organizando un grupo de rock llamado “Los Epistemitativos”. De todos modos, la indiferenciación es una etapa primaria del caos. Por supuesto, es importante (cuestión que mucha gente también lo tiene claro) entender la necesidad de estudiar con prudencia y detenimiento los traslados mecanicistas recíprocos entre las ciencias naturales y las sociales; por ejemplo, la experimentación en psicología o la psicología de los investigadores. Pero también es urgente, el avocamiento a la cuestión de la unidad del conocimiento: anhelo de muchos, creencia de pocos.

Este río que arrastra muchas piedras tiene su impacto. Paradójicamente, se exige a los estudiantes de pregrado y postgrado en muchas universidades “un encuadre epistemológico y ontológico” (así, como separaciones excluyentes en algunos casos), ¡como si un trabajo intelectual serio no se explicara a si mismo! Tal imposición, a todas luces formalista, viene a sustituir aquella famosa sentencia positivista, también formalista, que reza “si no lleva análisis estadístico, no es científico” ¿!!? Es práctica común que los aspirantes a títulos de postgrado, ¡también algunos de pregrado!, sin ninguna actitud crítica y creadora implanten (por el procedimiento de "cortar y pegar", ahora facilitado por las computadoras y por INTERNET) las justificaciones de sus proyectos.

Esa megaproliferación de la epistemología, cuestión que no es mala o buena, porque no es religiosa, me hizo recordar lo que leí en una revista (me disculpan los editores porque no recuerdo cuál) hace muchos años, un artículo cuyo título era algo así como “Gerente de la Sección de Papas” de un supermercado, refiriéndose a la popularización del cargo de gerente; por ello para nada me extrañaría que pronto lancen al mercado unos zapatos con la marca “Deportémico”.

La actitud de reverencia hacia las modas académicas ha producido toda una subcultura densa, seria, muy seria, que ya se ha convertido en un ámbito para la investigación misma, y que implica cuestiones como las siguientes:
1. El surgimiento de una especie de profesionales que se autodenominan “Epistemólogos.”
2. La organización de profesionales en torno al tema a través de grupos de asesoría.
3. Páginas web.
4. Producción de tesis doctorales en serie, con cambios sólo en su apariencia, contraviniendo el código de honor de la originalidad y creatividad.
5. Producción de libros, artículos y revistas.
6. Organización de redes formales e informales de investigación centrada en el sujeto. Por cierto, creo que existe en algunos de los epistemólogos de nuevo cuño una cierta tendencia a no aclarar la diferencia entre sujeto como individuo y sujeto como categoría (o, más bien, como complejo discursivo fluyente).
7. La fundación de núcleos de investigación cualitativa.
8. La transformación casi automática de investigadores en otrora dedicados a las denominadas ciencias experimentales (como la química o la física), a las ahora denominadas investigaciones cualitativas de modo exclusivo.
9. El bautizo, con muchos padrinos, de ciertas prácticas "cualitativas" con el nombre de PARADIGMA CUALITATIVO.
10. La inclusión desmedida de elementos curriculares universitarios relacionados con la epistemología.
11. La realización de cursos, talleres, seminarios, jornadas y congresos nacionales e internacionales sobre el tema.
12. La multiplicación no sólo de cultores, acólitos, seguidores, cofrades, sectas secretas, sino hasta "investigadores cualitativos" al mismo estilo de la otrora expresión "investigadores de bata blanca", organizadas en torno a las TESIS DOCTORALES y los TRABAJOS DE GRADO DE MAESTRIA en los cuales "las bases" y "el ser" parecieran ser fines en sí mismos: ¡vaya obstáculo epistemológico!

Por supuesto: ¡Bienvenidas las prácticas académicas serias cuyo propósito esté dirigido a la discusión, la reflexión, la crítica edificante, el reconocimiento de los límites y de los obstáculos!

Presento mis disculpas por pensar a veces con cierta desconfianza. Se me ha ocurrido que en el fondo, aunque no tan al fondo, de algunos de estos "virajes" cognoscitivos, existe una red de motivaciones, o una motivación compleja, en donde pudiera estar brillando un nodo dentro del sistema: la economía, en su modalidades "macro" y "micro" y, claro está, constituyendo una férrea estructura con las actuales vicisitudes políticas e ideológicas que se mueven como fuertes corrientes marinas en el mundo. ¿Será entonces que un nuevo PARADIGMA económico-político-ideológico puja por abrirse paso?, uhmmm....

Unas semanas atrás una amiga, aspirante al título de Doctor en Educación, me preguntó que "cuánto le costaría mi asesoría para su proyecto de tesis", y le respondí en broma:


- Profesora, si la tesis es cuantitativa le costará aproximadamente mil dólares, ahh, pero si es “cuali” le costará aproximadamente entre 2 y 3 mil, dependiendo de si usamos o no paquetes para el análisis de datos. Y mire que se la estoy dejando por debajo de los precios del mercado, pero recuerde que el trabajo final tiene otro precio. ¿Ok?

Su respuesta no se hizo esperar:


-¡Increíble, hasta ahora es el presupuesto menos costoso que me han planteado!


Pareciera entonces que la epistemología, como moda, se ha enmarañado en algunos espacios de "discusión" a partir de una "subjetividad" extraña, según un supuesto "decreto posmoderno" como justificación de la exclusión de toda coordenada que tenga que ver con la modernidad: ¿con la ética?...de todos modos, cuando el río suena...

Alvy Bryce Calles
bryce.alvy@gmail.com
To be continued...Próximo tema: Los Epistemólogos.
Crédito para el fractal: